jueves, 26 de marzo de 2020

Que tu sí sea sí y tu no, no

Tampoco jures por tu cabeza, porque no puedes hacer que ni uno solo de tus cabellos se vuelva blanco o negro. Cuando ustedes digan “sí”, que sea realmente sí; y, cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más, proviene del maligno. (Mateo 5:36-37)
Tan acostumbrada estaba la gente a mentir que la única forma en que se tomaba enserio su palabra era jurando ¿te sucede lo mismo?, ¿si no acudes a juramentos la gente no te cree por tu expediente de mentiras y promesas rotas? ¿Hay integridad en tu hablar o te manejas con la mentira? ¿Vale tu palabra?

Para profundizar: Col.3:9; Ef.4:25; Sal.15:4